UNDRR ROAMC: Impacto de los desastres en América Latina y el Caribe 1990-2013
Las pérdidas a causa de los desastres se convierten usualmente en obstáculos del desarrollo sostenible. La atención del desastre, la provisión de ayuda humanitaria a las personas afectadas, la reposición de servicios básicos, la recuperación de los medios de vida y la reconstrucción de las obras de infraestructura dañadas, demandan el uso de importantes recursos públicos y privados que de otra manera habrían sido empleados en promover el desarrollo.
Según el Informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres 2015 (GAR por sus siglas en inglés), en el caso de varios países de la región, las pérdidas por desastres son cada vez mayores y llegan a significar anualmente un porcentaje significativo de su producto interno bruto, y un porcentaje aún más alto si se compara estas pérdidas con las cifras del gasto social que realizan, llegando en algunos casos a representar entre el 30 y 50 por ciento de dicho gasto. La situación es aún más extrema para los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo.
A pesar de ello, son muy pocos los gobiernos de América Latina y el Caribe que conocen, aunque sea de manera aproximada, a cuánto ascienden realmente las pérdidas a causa de los desastres. La mayor parte de la información disponible se refiere únicamente a las pérdidas por grandes desastres que han sido evaluadas con apoyo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), fundamentalmente con el propósito de medir su impacto macroeconómico y obtener fundamentos para ya sea plantear la reprogramación de los créditos de la banca multilateral de financiamiento, o negociar nuevos créditos para contar con liquidez en la caja fiscal y así poder afrontar los gastos que la respuesta y la recuperación post desastre demandan.
Sin embargo, la información disponible es muy limitada y no toma en cuenta las pérdidas ocasionadas por desastres pequeños y medianos que ocurren con mucha frecuencia, y que sumados, provocan iguales o mayores pérdidas que los grandes desastres que ocurren esporádicamente.
Entonces navegamos en aguas desconocidas e ignoramos la dimensión real del problema, lo cual puede llevar a pasar por alto potenciales pérdidas que, dependiendo del estado de la economía de un país, podrían llegar a comprometer su solvencia fiscal con el consecuente impacto sobre el bienestar de la población y sus expectativas de crecimiento y desarrollo.
Esta publicación tiene por objeto presentar a los países de la región y sus líderes, datos estadísticos y tendencias históricas sobre las pérdidas por desastres, tanto las relacionadas con los eventos grandes como con los medianos y pequeños, distribuidos geográficamente a nivel de municipios, provincial, departamental o estadual, para conocer mejor sobre el riesgo de desastres y entender con más precisión cuál es la realidad. Esto con la esperanza de motivar una mayor atención a este problema que vive la sociedad contemporánea y que de ser ignorado podría llevar a pérdidas cada vez mayores en el futuro